El miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, comunicó este miércoles, mediante su cuenta en Twitter, la derrota de la maniobra anticubana auspiciada por la Organización de Estados Americanos (OEA), al obtener el rechazo de la mayoría de los países miembros

La convocatoria realizada a los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) para, con fines injerencistas, «analizar» este miércoles «la situación en Cuba», fracasó estrepitosamente ante la negativa de la mayoría de sus países integrantes.

Así lo comunicó en Twitter el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, lo cual calificó como una derrota para las pretensiones del ente proyanqui.

«Derrotada maniobra anticubana en OEA. Rechazo de mayoría de Estados miembros obligó (a la) suspensión del Consejo Permanente», publicó el Canciller, a lo que agregó que el Presidente pro témpore del Consejo admitió el fracaso mediante una «carta patética que ofende a Cuba».

Rodríguez Parrilla también agradeció a los países «que defendieron la dignidad latinoamericana y caribeña».

De acuerdo con un reporte de Russia Today, Washington Abdala, presidente pro témpore del Consejo Permanente, informó que, tras recibir planteos por parte de algunos países, se decidió postergar la reunión para realizar las consultas que puedan resultar útiles.

Abdala añadió que ha solicitado a la Secretaría de Asuntos Jurídicos de la organización un informe respecto a la situación de Cuba en relación con la OEA –organización sin moral y con un largo historial de traiciones a los pueblos de América Latina–, que será compartido con las delegaciones cuando esté disponible.

 Múltiples han sido los mecanismos de presión que el Gobierno de Estados Unidos ensaya, en los últimos días, para forzar a terceros países a pronunciarse contra Cuba, un propósito mendaz entre esos tantos que la OEA facilita con fidelidad de lacayo.